Como era mencionado, el calendario bueno de los trabajos de la pulverización de los medios protectores para los manzanos, las ciruelas, las peras y otros árboles frutales incluye no sólo los plazos, cuando esto es mejor hacer, sino también la información sobre el que por rociar los árboles por la primavera incipiente, a finales de la primavera, el verano y el otoño.
Oír sobre la utilidad del tratamiento y saber, cuando es necesario rociar los árboles ― es dos cosas diferentes. La pulverización inoportunamente aplicada del huerto, no le permitirá conseguir el resultado deseable al completo en el mejor de los casos y le dejará sin cosecha en peor. Es necesario pasar el tratamiento de los árboles frutales no sólo, cuando a ellos se han formado ya los frutos, sino también mucho tiempo antes de esto, la primavera incipiente, y hasta después de la recogida de toda la cosecha y la caída del follaje – el otoño avanzado y, por sí mismo, el verano, en el fragor de la actividad de los saboteadores.
Y la última rociadura otoñal de los árboles debe pasar entonces, cuando han perdido las hojas y la cosecha, e incluye no sólo el trabajo con las plantas mismas de frutas, sino también con el follaje que ha caído dejado bajo el árbol. Más tarde se puede pasar la rociadura de los árboles después de las primeras heladas, preliminarmente habiendo arreglado de la parte el follaje, las malezas y las ramas que han caído es decir, todo lo que se ha acumulado por la temporada.
Claro, usted decidir, que rociar los árboles frutales en primavera, ya que es su jardín. Y los medios para el tratamiento del jardín, al día de hoy, hay una variedad enorme, que se acercan como para los trabajos tempranos primaverales antes de la formación de los riñones cerca de los manzanos, las peras y las ciruelas, y durante la soltura de las hojas, el florecimiento y la formación de los frutos.